Hay un momento en que la vida se precipita. Voy de nuevo. Hubo
un momento en el que mi vida se ha precipitado. Que vendría a ser lo contrario
de estar detenida. Yo estaba detenida suspendida entre paréntesis paralizada y
luego mi vida se ha precipitado. A veces es un acontecimiento. Voy otra vez. No
está claro que haya sido solo un acontecimiento. Posiblemente fueron varios,
una sucesión de acontecimientos o una sucesión de otra cosa. El asunto es que
me he precipitado, salido del adentro asfixiante con rejas gruesas como garrotes. Tendría mucho
miedo. Otra vez. Tenía mucho miedo. Fuera había tiburones y cocodrilos. Había
serpientes. Las serpientes se metían entre las rejas , en mi cuarto mi cama. Se
metían entre mis piernas. Mordían mi sexo mi adentro me sangraban el corazón se
quedaban a vivir .Solo quedaba un cuarto de baño pequeño a salvo. Para
encerrarse en él. Encerrarse aún más. Encerrarme aún más y sentirme a salvo. Sentirme
a salvo de las serpientes que me devoraban también los ojos .La mirada. Hace
años que yo andaba ciega. Y entonces parece que es de pronto que la vida mía se
precipita pero tengo la sospecha de que no .Hoy se empapa de lluvia desnuda. Hoy
me desnudo bajo la lluvia y el cuadro
que no es estático se completa con el cuerpo desnudo de la mujer que amo. El
cuerpo desnudo de la mujer que amo y ríe a carcajadas tal vez sintiendo también, que
parece posible.
13 comentarios:
tenemos la vida detenida y nos sorprende lo que nos libra del lastre y nos abre todas las posibilidades de movimiento.
Pero ¿sabes? hay mucha gente que no se atreve.
Tu te has salido de las rejas porque has sido valiente, primero contigo misma, luego con el entorno.
¿Quién puede evitar que disfrutemos bailando desnudos bajo la lluvia? Solo nosotros mismos.
Seguir bailando y riendo a carcajadas. Ambas.
todo es posible.
me alegro mucho por vos, de verdad.
un beso muy grande
L.
La mujer que amas también espantaba serpientes, también fue mordida en sus ojos y en su sexo, también se vio precipitada. Pero el sacrificio es el preámbulo de la ceremonia, y cuando eso ocurre, Loba, somos inmensamente dichosos.
Un beso.
La mujer que amas también espantaba serpientes, también fue mordida en sus ojos y en su sexo, también se vio precipitada. Pero el sacrificio es el preámbulo de la ceremonia, y cuando eso ocurre, Loba, somos inmensamente dichosos.
Un beso.
te salvaste de los draculas que a mi me agarran y me yugulan
Me gustan las personas valientes que defienden su ser ante que caer en la complacencia hacia los demas.
Te dejo un beso y se feliz!
vas de nuevo, en el texto y en lo que te está sucediendo. vas de nuevo, una y otra vez, con garra.
lo extraordinario no es que parezca posible, sino habernos habituado a que no lo sea.
te adoro.
un beso!
Hay un segundo en la vida, en el que encontramos la llave correcta.
¡Felicidades!
Me muero de amor
Que dichosa la mujer que conquisto el tuyo
Un besazo!
Ana
tropezar de nuevo con esa piedra.
caer?
precipitarnos al delicioso abismo...
Claro que es posible, tú lo haces posible, y es ese paso, ese danzar desnuda bajo la lluvia la que hace posible la dicha de vivir verdaderamente la vida.
Un abrazo, Loba.
Bien está lo que bien acaba.
Besos.
Es que con esa entrada lo dijiste todo de salida. Sí, aveces se precipita. Y cae como un piano de cola y hace el escándalo de los gallos a las 5. Ni modos. ¡Un abrazo! F:
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